Los habitantes del barrio Santa Isabel no pueden entrar a su caseta comunal a realizar actividades lúdicas o de cualquier tipo, debido a que el presidente de la Junta de Acción Comunal, Wilson Fabio González, cerró la sede comunal con un candado diferente al que les habían provisto desde la administración municipal.
La acción indebida del presidente de la JAC, tiene preocupada a la población del barrio, quienes están desprovistos de una sede para realizar diversas actividades, entre las cuales están las asambleas de gestión.
En la caseta comunal además se realizan actividades como danzas para la tercera edad, donde asisten 4 grupos de abuelos; reuniones sociales; programas de integración comunitaria, como charlas de la Gobernación y un programa de termoterapia de la Alcaldía Municipal.
“Este señor no ha hecho mucho por la comunidad, fue un error haberlo elegido como presidente de Junta, miren el mal tan grande que nos ha hecho”, manifestaron algunos de los habitantes del sector.
Los abuelos han tenido que desplazar la práctica de baile a otros espacios como el parque de la localidad y sus propias casas, donde no caben debido a que son más de 300 abuelos quienes practican esta actividad.
Abuso
Desde hace mas de 3 años Wilson Fabio González se alojó en la caseta comunal después de quedarse sin un lugar donde vivir. La comunidad del barrio acordó que su presidente de Junta podía ocupar el sitio durante un tiempo prudente, que se extendió hasta hace unos 3 meses, cuando mediante acuerdo con el municipio decidió desalojar.
Después de haber desocupado la caseta, "González dejó algunos objetos propios en el lugar y se quedó con las llaves del sitio, monopolizando la entrada y salida de la caseta", según declaraciones de los vecinos. Pero además no pagó los servicios públicos y se le suspendió el flujo de energía al recinto, a lo cual la comunidad no le encuentra justificación.
En días pasados algunos de los habitantes del sector se reunieron en el lugar sin pedir el permiso al presidente de la Junta, haciendo uso de su derecho de usar el lugar, a lo cual él respondió poniendo un candado doble en la entrada de la caseta, negándoles la entrada.
Por lo anterior los habitantes enviaron una carta con firmas pidiendo su destitución como presidente de la JAC, aludiendo que “este señor es un peligro para la comunidad por apropiarse de un bien inmueble del municipio sin autorización alguna y suspendiendo las actividades de los habitantes del barrio”.
Gestiones
Luego de consultar con funcionarios de la Secretaría de Desarrollo Social y Político, encargados de prestar la vigilancia y control de las Juntas de Acción Comunal en Dosquebradas, respondieron que se están adelantando las investigaciones pertinentes para abordar el caso, porque la denuncia ya fue puesta en conocimiento del despacho.
Así mismo se preguntó a Hernando Usma, funcionario de la Secretaría de Gobierno encargado de las casetas comunales, y este respondió al respecto que se dictará una orden de desalojo en los próximos días, porque esta acción no tiene justificación alguna.
“Las casetas comunales son bienes inmuebles del municipio para el beneficio de toda una comunidad, no de una sola persona”, argumentó Usma, quien además se mostró sorprendido por la acción indebida del presidente de la mencionada JAC.
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